lunes, 8 de marzo de 2010

De la Tierra a la Luna... ¡otra vez!

Imagínense a Neil Armstrong llegando a su casa un sábado a la tarde-noche luego de su misión a la luna. Una ducha caliente, una buena comidita, el amor de su esposa, la dulce compañia de sus nenas y esa satisfacción incomparable del deber cumplido. Luego, una noche de sueño reparador con la alegría de estar nuevamente en casa. Imagínenselo al día siguiente, domingo, tomándose los primeros mates de la mañana y divagando con las posibles y hogareñas actividades del día. Y entonces suena el teléfono. De la NASA: "Che, Neil, hoy nos vamos devuelta para la luna ¿te prendés?".

Pues sí. Ayer a eso de las once de la mañana me manda un mensaje mi entrenador invitándonos a pasar el día en Quila-Quina. Como lo sospeché desde que leí el mensaje, él, Guada (su mujer), Guadi (su hermana), el Tano (su cuñado) y Edu (sí, Edu, el archienemigo), iban a ir en bicicleta. ¿Qué podía hacer yo?¿Dejar que la hazaña del día anterior se viera opacada por el arrugue del día presente? "Yo voy con ustedes", dijo mi orgullo. Me cambié, y a las dos estaba en la puerta de la Abuela Ana (¡que buenas pastas que tienen!).

No me voy a extender en el relato porque, más allá de que en esta oportunidad eramos seis bicicletas, el sufrimiento del recorrido fue muy similar al día anterior. Miento. Fue bastante peor. Mis piernas acusaban el cansancio. Pero estaba Edu. Y estaba Gonzalo. Fui cola todo el recorrido, escuchando las sabias recomendaciones de mi entrenador y del Tano que, a pesar de ser IMPARCIAL (es juez oficial de todo este asunto) me daba indicaciones para que la cosa fuera justa. Y llegamos al final del ascenso con algún empujoncito de Gonza, lo confieso. Y la bajada... la bajada. Si el sábado fue para disfrutar el paisaje, ayer fue pura adrenalina. Cuando empezó la pendiente fuerte, Gonzalo y el Tano se zumbaron para abajo, a ritmo de carrera. Y yo me les pegué atrás. No quise que se me escaparan. Y estuve al limite del palo en todo momento. Llegué pocos segundo después de ellos sintiéndome, como se imaginarán, un corredor profesional.

La tarde en Quila Quina fue esencialmente gastronómica. Tuvimos que esperar a Julián, a la abuela Ana (por cierto, los menú del día que ofrecen... ¡que manjar!) y a Alicia que iban a venir con las nenas en la lancha pero, por malas condiciones del Lago, pegaron la vuelta y llegaron en camioneta. Lo primero que me ofrecieron fue una torta de chocolate, con mousse y nueces. Luego le entré a los bizcochitos de grasa. Las facturas no se hicieron esperar. Un durazno, por lo de lo sano. Y, entre mate y mate, Ana saca unas empanadas de muzzarela, tomate y albahaca que, por algún extraño fenómeno químico, se habían teñido todas de rojo. Estoy de los más tranquilo con un cañoncito de dulce de leche en la boca cuando veo que a Edu le están entregando una barra de semillas de cereales super energizante, con el valor de dos power gel y dos litros de licuado de banana. Esa fue su única colación. Algo no estoy haciendo bien, pensé.

El asunto es que todos iban a volver en lancha y mi bici la ibamos a cargar en la camioneta de Pipi. Pipi no fue. La lancha no llegó. Gonza dijo, "yo vuelvo en bici". Edu retrucó "yo también". El Tano, por supuesto "yo pedaleo". Y Guadi, que dudaba, me miró y dijo "luquitas, si vos nos acompañas yo también vuelvo en bici". Y yo -que no tengo alternativa- acepté.

A los diez metros de la primer subida supe que había cometido un error. Tenía las piernas totalmente quemadas. No me sobraba nada. Pero ahí estaba mi entrenador. Con una fuerza de piernas que yo no logro explicarme, me remolcó practicamente toda la subida. Y Edu, como un moscardón, haciéndome la cabeza todo el trayecto: "falta muchísimo, para qué sufrir así, acordate de esto mañana, el asado igual lo paga Gonzalo", etc., etc., etc,. El Tano me dió un par de empujoncitos y sobre el final me mostró en la práctica la técnica de "chuparse" (que no es tomar vino en demasía, sino pegarse al de la bicicleta de adelante). Y así, increíble como suena, llegamos todos al pueblo. Dos días seguidos, de la Tierra a la Luna. Chupate esta mandarina, Neil.

Aprendí dos cosas: hay que conocer los propios límites (si me mandaba solo no hubiera llegado) y que a la botellita de agua que uno pone en el caño de la bici se le dice "caramañola". Lo supe porque perdí la mía en el descenso. Este dato lo dejo en período de estudio porque según nuestro gran amigo el churra (árbitro de Tercer Tiempo y corredor del Tetra) la palabra correcta es "caramayola". Lo dejo para el debate.


Por último, una imagen para que entiendan cómo me sentí este fin de semana:


Cronómetro: es lo de menos, fui y volví.

10 comentarios:

  1. Lucas, este es mi primer comentario en tu blog y puedo decirte con orgullo: "tenes el tetra en el bolsillo".
    Guady.

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  2. "La sorpresa del Tetra" mas de uno no podran creerlo,te van a pedir doping.Y como dice Adry,la fuerza de la banda te acompaña siempre.

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  3. Y hoy para dónde???

    dale dale dale ;)

    (eso si no te lesiones)

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  4. Eduardo te están buscando un tal Voltaire que dice que como no se le ocurrió antes eso de que "la viuda es para disfrutar y no para sufrir" Le mandé tu mail pero no se anima a llamarte Ja-ja.

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  5. no está mal lo de la viuda porque quedó jovencita ja-ja
    que boludo pa escribir

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  6. Para que Edu no se siga chafando frases, ahí agregué lo que Voltaire en realidad quiso decir...

    Y a las chicas... ¡gracias! Con esta ola de comentarios femeninos me siento Sandro (lo que puede un traje de astronauta).

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  7. Gonza (el empujador)8 de marzo de 2010, 21:33

    a las chicas solas no. A mi viejo tambien le gusto lo del traje de astronauta. No se, estoy un poco confundido

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  8. OJO !!!!!no se metan con el abuelo Ano!!!!

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  9. Lucas, afloja que nos estas matando

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  10. eduardo el archienemigo9 de marzo de 2010, 16:59

    Luquita va a ser mas facil que vayas a la luna ,que termines el tetra, de todos modos cuando vengas con el caballo cansado tal vez llegues de la patadita que te va a dar el entrenador por tener que pagarlo
    Aparte preparate para la fiestita previa al dia del tetra que vamos a hacer
    muchas chicasy que pase de todo, al dia siguiente vemos como va el tetra por radio

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