martes, 9 de febrero de 2010

Running Cartesiano

Haciéndole caso a mi amiga Adriana hoy salí a correr a la hora de la siesta y, para colmo, de un día nublado (tema cerrado). A los poco metros tomé conciencia, repentinamente, de que hay algo inherente al correr: el pensar. Un pensar interesante, porque no es del todo libre. A los tres minutos uno empieza a quejarse: "ya me duele la planta del pie", "no voy a poder correr dos pasos más", "para qué me metí en esto". Tanto costaba mover mi cuerpo que me fuí directo a la primer ley de Newton: “Un sistema de referencia en el que son válidas las leyes de la física clásica es aquel en el cual todo cuerpo permanece en un estado de movimiento rectilíneo y uniforme en ausencia de fuerzas.” El problema es la inercia. Los primero metros (unos 3.000) cuestan un gran trabajo, pero una vez que uno pone el cuerpo en movimiento este -el movimiento- permancerá rectilineo y uniforme. Así, elucubré que me quedan unos seis meses para descifrar como anular la totalidad de las fuerzas que inciden en mi cuerpo y lo detienen y de esa manera el Tetra estaría asegurado. Lo cierto es que luego de diez minutos la cosa se normaliza y, de cierta manera, el cuerpo como que va solo (un capo, Newton). Por supuesto, pensando en el pensar uno no puede no pensar en Descartes, quién dudo de todo, excepto de que pensamos. En eso estaba cuando de repente ocurió lo inesperado: el agotamiento a causa de una lomita inoportuna llevo mi cuerpo a un estado de extenuación tal que dejé de pensar. Lo intentaba, pero solo podía seguir corriendo. No hilaba ya ninguna de las divagaciones que tanto me venían entreteniendo. Y mi cuerpo, de alguna manera extraña, se fundió con mi pensamiento y el secreto de la existencia se me hizo patente. Luego de tal experiencia no me ha quedado más remedio que, con total humildad, reformular la famosísima sentencia cartesiana que, para ser más precisa o, como gustaba decir él, clara y distinta, quedaría de la siguiente manera:
"Corro, luego existo"
Tiempo: 37 min.
Distancia: Incierta.

11 comentarios:

  1. Gonza (el entrenador)10 de febrero de 2010, 1:45

    En estas cuestiones de entrenamiento, la fisica, la mistica, y la perspectiva se conjugagan en una nebulosa en la que nada claro se escapa. por ejemplo una tremenda subida solo es asi dependiendo desde donde se la mire, pues sera una exquisita bajada si la miramos una vez arriba... pues solo un pensamiento te tiene que quedar claro:
    Entrena la puta que lo pario que sino tengo que pagar un asado!!!!!!!!

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  2. Menos pluma y mas cronometro!!!!!!!

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  3. ...qué haría yo sin mis mentores...

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  4. Lucas, soy tu hermano, te conozco bien, bajate ahora, pedi perdon y la gente va a entender,no estas hecho para esto, lo tuyo es el intelecto, no desarrollaste el lado de lo fisico, lo mono que hay que ser para estas cosas rusticas de lo fisico. igual estuvo bueno o no? Saludos
    yeti(el olimpico)

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  5. yoyanosequedecirte

    jajajajajajajaja

    Creo que Descartes te diría que:

    "exististe, luego corriste"

    "y solo exististe porque venías pensando"

    jajajajajaja

    quentrenestedigo!!!!

    ;)

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  6. Lucas Imagina los primeros dias de setiembre
    amanece lloviendo en San Martin Temperatura muy baja, y calentito en la cama se escucha por la radio, que lamentablemente el dia del tetra va a llover durante practicamente toda la jornada.
    Imaginate levantandote temprano ese sabado con un nevizca persistente, que hasta es impensable salir de los robles a esa hora, el auto congelado, probar y esperar a que arranque, salir ya mojandote desde tu casa , com semejante dia ideal para desayunar a las 11 con unos mates calentitos y unas tortas fritas o torta aunque sea del dia anterior para no tener que salir de la casa.
    la idea de manejar hasta el cerro a esa hora de la mañana resulta aterradora, y si encima hay que pensar en subir con esquies al hombro, para empezar a correr(ni hablar de terminar)
    No dudes que apagariamos la radio, y mas tarde, nos dedicamos a ver en que estado llegan (los que lleguen) con una sonrisa y diciendo pobres mira como estan.
    Anda imaginando este dia y date cuenta de que es asi nomas. deja el sufrimiento para otros y dedicate a gozar de la vida total es asado lo paga gonzalo, no vos asiqe ¿a que preocuparse?
    disfrutemos que la vida es para eso.
    otro dia sigo con los pormenores de la carrera

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  7. Yeti: gracias por lo sentido y sincero de tu comentario. Quizás tengas razón, pero ya no hay vuelta atrás. O llego o dejo la vida en el intento.

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  8. buen intento, Edu... buen intento...

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  9. Gonza (el entrenador)11 de febrero de 2010, 1:19

    Si fuera facil, todos lo harian, y dejaria de ser un desafio. Cualquiera come tortas fritas a la mañana mirando por la ventana un dia lluvioso. Pero no creo que a los dos dias recuerden ese momento, y mucho menos sientan ganas 2 meses despues de comentarlo en alguna cena con amigos. Pero acordate de este comentario cada ves que cuentes o recuerdes con gran emosion, "ese dia que corriste el tetra"

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  10. buen intento, Gonzalo... buen intento...

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  11. yo creo que entrenando seguro llegás. porque todos podemos llegar, solo hay que tener valor y nunca que rendirse.
    edu y gonsa:no intenten hacer que mi papá
    se rinda, si el dise que puede puede!!!

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